Punk: Attitude

Nunca fui particularmente seguidor del Punk. Cuando me empezó a gustar la música, no me cerré en un solo estilo: como buen péndex, escuchaba de todo un poco, y eso hizo que alguna vez hasta entonara cosas como, digamos, 'Ice, Ice Baby'...

Si hubo algo con lo que me engrupí fue con el grunge. Usé camisas leñadoras, me dejé una barba de chivo (en la medida de lo posible... tenía 16 años!), escuchaba a los emblemas de la época y claro, casi lloré con Pearl Jam en San Carlos de Apoquindo el año pasado (fui los 2 días).

La primera vez que me enteré de que había gente 'punk', que se vestían de forma 'punk' y que tenían actitud 'punk' debe haber sido con algún trasnochado reportaje de Santiago Pávlovic para Informe Especial, en los oscuros años '80.

Si la idea del reportaje era que te dieran miedo los punks, conmigo lo logró. Te dejaba la sensación de unos engendros siniestros que le pegaban a la gente sin motivo, y donde iban, lo destruían todo.

Como nos cambia la vida. Los años pasaron, y claro, conocí a los Ramones, a Sex Pistols y The Clash. Y más tarde, a Iggy Pop, Television y New York Dolls. Y....bueno, la lista es larga. Al hacerme adicto a la música, entendí que sin la Revolución Punk de la segunda mitad de los '70, no tendriamos miles de sonidos con los que hoy disfrutamos. Y más importante que eso, no tendríamos modelos a seguir cuando pensamos que no deberíamos obedecerles a nuestros padres, profesores, jefes o cualquier tipo de autoridad.

Este fin de semana, en Mtv se reivindicaron de meses vomitivos a punta de 'Laguna Beach' y 'Room Raiders', y ofrecieron un documental llamado 'Punk:Attitude' (Don Letts, 2005), un filme contundente y ultra didáctico para entender las raíces de la música punk y en particular, para captar de donde viene el famoso 'Do it Yourself', propio del movimiento.

Al terminar de ver el documental, es fácil engrupirse heavy con el punk. La actitud rupturista, arriesgada y extrema de muchos de esos tipos es como para salir corriendo y armar una banda propia. Ver tocando a gente como The Dictators, The Slits, Fugazi, Suicide o The Germs (en la foto: su voz, el gran Darby Crash) es super inspirador. Como que te hace acordarte porqué te gusta todo esto. Y por lo tanto, emociona.

Son miles los grupos que pasan frente a mis ojos. Y cada uno va tomando la posta donde la dejó el anterior. Algún agregan cosas del reggae (The Clash), y otros, de la electrónica (Suicide); algunos son más intelectuales (Talking Heads) y a otros les salen canciones más amigables(Blondie), dando forma a la New Wave.

Pero la ACTITUD es la misma: hacer algo que nadie hubiera hecho antes. Era estar molesto con el estado de las cosas y hacer algo al respecto sin esperar que otros lo hagan por ti.

La gran gracia del autor, Don Letts (el mismo moreno con dreadlocks que andaba en el Festival de Viña haciéndole un DVD a Franz Ferdinand) en este documental, es ampliar el concepto. Eso permite que no sólo nos quede clara la historia musical del punk (con un material de archivo alucinante), sino además, poder repasar las claves de la industria discográfica y cómo, desde tiempos muy pretéritos olfateó donde estaba 'lo cool' y se lo apropió, despojándolo de sentido.

Ver 'Punk: Attitude' hace que cuando después ves un videoclip de My Chemical Romance, el asunto te parezca un chiste de pésimo gusto.

¿O me estaré poniendo viejo?

Definitivamente de punk tengo bastante poco. Soy un tipo cómodo y con poca iniciativa. Me rebelo contra muy pocas cosas. Pero al menos puedo decir algo que no todos pueden: trabajo en lo que me gusta y no sólo por el cheque.

Como decía John Belushi: "Lo primero que tienes que aprender de la vida es que no tienes porqué comerte la mierda de nadie". Y hasta acá, no lo he hecho.

Punk, Not Dead.