La Espera se Acabó
Desde la primera escena de la primera película que le vi, el director Paul Thomas Anderson (en adelante, PTA) me mató. Era 1998 y ‘Boogie Nights’ llegaba al Cine Arte Alameda. Mucha gente hablaba del filme que retrataba el mundo del porno. Pero más allá de la obviedad calentona (que la había, obvio…estaban Julianne Moore y Heather Graham), lo que PTA ponía en pantalla era realidad: insolente, agresiva y mundana realidad. Jales por todos lados, gente tirando sin ganas y con ganas, y quiebres afectivos, tal vez demasiados. Puros bordes. Una película sin punta roma. Gente que reconocía fácilmente. Gente que estaba mal.
Con aire a documental, el filme acababa siendo más un historia sobre la familia que sobre la poderosa industria XXX. A la mina con la que fui al cine no la volví a ver. Debería generar esas experiencias más seguido para no perder tanto tiempo con ciertas personas, pienso.
Yo no viví desde el principio la crudeza de Martin Scorsese y me enteré mucho más tarde sobre el finado Robert Altman. Por lo mismo, para mí PTA era EL HOMBRE. Muchas cosas me cautivaron: de partida, el tipo escribió y dirigió ‘Boogie Nights’ a los 25 años sin siquiera completar su educación universitaria. Pero además, era la pareja de mi mujer ideal de aquel tiempo, la cantante Fiona Apple. Hasta le dirigió un par de videoclips.
Un par de años más tarde, ‘Magnolia’ terminaría por rematarme en el piso, y de ahí no me recogieron más. Ese filme es DEMASIADO importante para mí, por lo que se merece palabras mejor pensadas. Por ahora, sólo diré que su comienzo a-bru-ma dor, sus historias entrelazadas, e inverosímil final aún hacen que me haga preguntas que quizás nunca lograré contestar. PTA reconoce lo personal que es esa película. Dice que es sobre gente al final de su vida que miran atrás y no están orgullosos, sino todo lo contrario. Es un filme de 3 horas y 15 minutos escrito y dirigido por él para reconciliarse con su fallecido viejo.
‘Punch-Drunk Love’ (2002) es lo último que le conocimos. Y para bien o para mal, NO hay otra película así. Esa historia de amor protagonizada por el nervioso Adam Sandler es una experiencia extrañísima y no apta para todo el mundo. Fue el intento de PTA por abandonar la pretensión y la arrogancia, y hacer un filme de género: una peliculilla romántica de 90 minutos. Algo simple. No le resultó: ‘Embriagado de Amor’ (esa fue la traducción del título) es cualquier cosa menos una peli simple.
Y en eso estábamos. Supe que PTA se había emparejado con la comediante de Saturday Night Live, Maya Rudolph (la hija de la fallecida Minnie Riperton, responsable por la bellísima canción ‘Lovin’ You’). Y que pretendia adaptar una novela llamada ‘Oil’, ambientada a comienzos del siglo XX en el Oeste americano. No se sabía nada de imágenes.
Hasta ahora.
Esta semana se dio a conocer el ESPERADÍSIMO primer adelanto, de ‘There Will Be Blood’, lo nuevo del grandioso Paul Thomas Anderson, y está protagonizada nada menos que por Daniel Day Lewis. Yo ya no puedo esperar más. Necesito ver esa peli ahora. Mi sistema nervioso me lo pide. Aquí están las primeras imágenes liberadas:
1 Comments:
Notable este PTA
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