felipe arratia

Wednesday, October 24, 2007

Abrir el Sueño Stereo

A veces creo en Dios, pero con más frecuencia creo en Gustavo Cerati. Creo en mis recuerdos, emociones y experiencias, y todas ellas han aumentado generosamente gracias a Soda Stereo. Diez años, un mes y once días después de la última vez, nos hemos vuelto a encontrar. Tal vez no me lo crean, pero lo presentía. Sabía que esto no se podia acabar así no más.

El primer recuerdo siempre será el mismo: vacaciones de verano en Tongoy a mis tiernos 9 añitos, y un cassette regrabado que en cada viaje, fuera a la playa más lejana o a comprar el pan, sonaba sin cesar en el Citroen Visa amarillo. En esa grabación habían cosas como ‘Desnudita es Mejor’ de Divina Gloria, ‘En Todas Partes te Veo’ de María Rosa Yorio, o ‘Bailando en las Veredas’ de Raúl Porchetto. Pero la vedette del cassette era ‘Signos’ de Soda Stereo completito, el soundtrack de ese verano en Chile, el mismo verano del mítico show en Viña. Primera Sincronía.

Fast Forward. 24 de noviembre de 1995, Teatro Caupolicán. Se lanza ‘Sueño Stereo’ y mi papá y yo estamos presentes. Ese día es el último que voy al colegio. Segunda Sincronía.

13 de septiembre de 1997, Estadio Nacional. Soda Stereo dicen adios. El show es algo apagado, y parece lógico: nadie quiere que se vayan. Es el año en que entro a la universidad. Tercera Sincronía.

En el año de mi independencia, el 2007 (a 20 años de la primera sincronía, y 10 de la segunda), los Soda no podían faltar a la fiesta. Cuarta Sincronía.

(‘Hola, Chile Lindo. Bienvenidos al Juego’) 21:02: los tres están sobre en escenario. Uno maneja los tiempos y los otros acatan, pero el goce es comunitario. ‘Juego de Seducción’ estremece, y señala la pauta de lo que veremos los próximos 150 minutos: un escenario imponente con un juego de luces A-LU-CI-NAN-TE, y un power trío que viste de rock todo lo que puede sus insuperables himnos pop.

(‘¡Pero qué Reencuentro! ¿Movemos el Nacional?’) ‘Tele-Ka’ e ‘Imágenes Retro’ nos llevan como el Delorean a viajar por el ’86, confirman su vocación bailable y new wave, y en el caso del segundo track, lo alargan a punta de guitarreos elásticos. Cerati se ve de buen humor: luce barba de cuatro días, pelo ensortijado y look vaquero. Al comenzar ‘Texturas’ se despoja de un chal que llevaba y Zeta hace lo propio con su gorro. El track que cierra 'Dynamo' ataca rockerísimo y lleno de distorsión.

(‘¡Vamos Santiago! ¿Están contentos? No tienen idea de lo que significa esto para nosotros. No lo olvidaremos jamás’) Zeta ya se liberó de su chaqueta sacada de ‘El Principito’ y queda en camisa negra de manga corta. Charly Alberti parece mirar todo desde lejos. El ‘Planeta Charly’ es blanco (blanco de canas), distante y frío. Pero a la vez funcional. Al final de ‘La Ciudad de la Furia’ hay un momento de feeling grupal al juntarse los tres en el centro del escenario para cerrar la canción. Como una verdadera banda.

(‘Miren eso tan lindo (la luna llena). Debe ser eso lo que nos tiene tan calientes’) ‘Picnic en el 4B’ y ‘Zoom’ (con armónica de Zeta incluída) prolongan la magia, pero el peak se guarda para una gran favorita del público nacional: ‘Cuando Pase el Temblor’ no sólo cumple con su status de hit, sino que le suman un final estilo reggaeton que, curiosamente, se ajusta muy bien al tema. Para estas alturas, se hace evidente que el setlist es el mismo del domingo 21 en River, lo cual implica que no escucharemos ‘En Camino’. Una pena.

(‘Gracias Preciosos. ¿Quieren Bailar?') El grueso de las chicas ya han agotado sus suspiros con ‘Trátame Suavemente’ (presentada como ‘una canción de Daniel Melero’) y ahora es momento de agitar el cuerpo. Para ello, nada mejor que la tripleta venidera: 'Sobredosis de TV’, ‘Danza Rota’ y ‘Persiana Americana’, bombazos directos al esqueleto y clasicos instántaneos cuyas letras nos sabíamos desde que nacimos.

(‘Che, nunca vi tantas cámaras en mi vida, ¿eh?') Un primer momento sublime personal llega con ‘Fue’ y el segundo saludo al maravilloso ‘Dynamo’. Quedan en evidencia ahí en Cancha Vip cuáles son los fanáticos nerds y los fans que escuchaban Soda sólo en la discoteque. El orgasmo se prolonga: la única alteración con respecto al show de domingo en River está sonando y se llama ‘En Remolinos’. El bloque dedicado a ‘Dynamo’ cierra con la inevitable ‘Primavera 0’, muy canchera.

La agresividad de ‘No Existes’, y la espléndida ‘Final Caja Negra’ un rato antes, permiten cerciorarse de que los tracks menos difundidos de ‘Signos’ crecen sin sufrir la erosión de éxitos demasiados rotundos como ‘Prófugos’.

Se sabe que Cerati es un tipo poco dado a la democracia en lo que a ordenar al escenario respecta. Por lo mismo, los músicos de apoyo son escogidos con pinzas y responden sin problemas a la exigencia: Tweety Gonzalez en teclados, Leandro Fresco (que toca en la banda solista de Cerati) en sintetizadores y el cantate Leo García, en guitarra y…coreografías (desatada, ella). Eficientes pilares.

Es momento para el bloque final, y llega de la mano de su obra maestra, ’Canción Animal’. Curiosamente el track homónimo no sonará, pero sí lo hacen ‘Sueles dejarme Solo’, ‘En el Séptimo Dia’, ‘Un Millón de Años Luz’ (que incluyó un cambio de lado de escenario entre Zeta y Gus) y ‘De Música Ligera’ (más bien desabrida, ¿eh?). Luego de ello, un ‘Chau, divinos’ sello el intermedio.

De regreso, la impecable ‘Disco Eterno’ montó el chill out, para dar paso a una que yo deseaba demasiado: ‘Cae el Sol’, mi favorita de la noche. Antes de empezar ‘Prófugos’, momento freak: Gustavo detiene los redobles de Charly y dice ‘Pará, pará. Estamos en Chile. No hay tiempo suficiente para agradecer el abrazo eterno que nos dieron’. Al permitir que la canción empiece, su guitarra no suena, y el hombre simplemente la tira lejos por un costado. ‘A las guitarras si se les puede tratar de forma cruel', justifica.

Una breve salida, y el regreso es con una curiosidad del setlist, ‘Zona de Promesas’. ¿Cierre definitivo? Una muy divertida versión de ‘Nada Personal’, con el público saltando como loco a pesar del frío reinante.

'Te Quiero, Soda', aulló a mí lado muy naif una argentinita bella de edad indescifrable. Me sumo al grito: necesitaba esas canciones. Las echaba mucho de menos. 'Buenos Aires, Buenos Aires, humedad.....'.

Setlist: Juego de Seducción / Tele- Ka /Imágenes Retro / Texturas / Hombre al agua / La ciudad de la furia / Picnic en el 4to B / Zoom / Cuando pase el temblor / Final caja negra / Trátame Suavemente / Signos / Sobredosis de TV / Danza rota / Persiana americana / Fue / En Remolinos / Primavera 0 / No existes / Sueles dejarme solo / En el séptimo dia / Un millón de años luz / De música ligera / Disco eterno / Cae el sol / Prófugos / Zona de promesas / Nada Personal

Tuesday, October 23, 2007

No Me Pidas Más de lo Que Puedo Darte

A no ser que ocurra algo excepcional que lo amerite, este será el último post que escriba sobre los premios MTV. Creo que ya he escrito en suficientes lugares lo que opino al respecto, y no quiero parecer monotemático ni anclado al pasado, cual Julio Martínez de los ’90.

Además, creo que Marisol García ya lo dijo de forma mucho más asertiva, sintética y elocuente en su blog.

El asunto es simple: MTV Latino agoniza. Su premiación del jueves 18 fue la muestra más clara. No quiero parecer como esos fanáticos que no aceptan la renovación necesaria de artistas, medios o estilos; sino que prefiero enfocarme en lo que repruebo. Para mí, los problemas son dos:

a) La Dictadura del Pop: Amo el pop: Madonna, Sophie Ellis Bextor y el infinito etcétera. Hace un rato que Pharrell Williams es mi artista favorito.Todos saben que mi opción siempre va a ser un estribillo pegajoso. Pero en un canal de TV con esa tribuna, DEBEN haber más opciones.

Latinoamérica es un país donde el rock y sus derivados siempre han tenido una presencia demasiado relevante. Obviamente es una región donde hay harto más para rebelarse, y por lo tanto, Manu Chao, Rage Against the Machine y System of a Down son soundtrack permanente. ¿Dónde se vio representado eso en la premiación? ¿Con 30 Seconds to Mars?

Todo bien con Kudai y Six Pack, pero es poco serio que ellos triunfen en una categoría en donde antes salieron derrotados Los Prisioneros y Los Bunkers. Le resta relevancia a su galardón. Y por favor, no me vayan a venir con la tontera del ‘voto popular’. Eso no se lo cree ni Raquelita.

b) Divide y Vencerás: Sé que MTV Latino ensayó todas las fórmulas posibles, pero no hay caso: a los latinos NO NOS GUSTAN LAS MISMAS COSAS.

Si en Argentina son Los Piojos, en Chile es Chancho en Piedra; si en Colombia es Cabas, en México es El Tri. Y las idiosincrasias, culturas y acercamientos a la música son muy diferentes. Las Shakiras, Juanes y Rickys se dan una vez cada mucho rato y para ello deben confluir demasiados factores.

Por eso, es inevitable que en cada premiación de MTV nos sintamos muy, pero muy poco representados. Ni por la música ni por quiénes tratan de venderla . ¿Nicole Neumann presentando Mejor Video Rock? ¿La misma que dijo que su música favorita es “la de los CD’s”?

Al menos uno podría esperar ver un buen programa de TV, pero tampoco. Los guiones eran de cuarta y no hubo actuaciones en vivo memorables (¡Qué horroroso el tributo a Soda Stereo al final, Dios Mío!). De ahí sólo rescato a Babasónicos que hicieron ‘El Colmo’ con Quique Rangel de los Café Tacuba en bajo, las caderas de Hillary Duff, y la honrosa presentación de una Avril Lavigne que hace su negocio muy bien y no tiene ninguna culpa de que los de MTV Latino se la puedan conseguir sólo a ella en lugar de Beyoncé, Rihanna, u otra nena.

El tema es claro: no se puede seguir buscando agua en el desierto. MTV hoy es 'Quiero mis 15', 'Next' y 'Laguna Beach'. Ya está. La música dejó de ser una prioridad hace mucho para el canal de video música.

Ultima cosa: ¿Una entrega de premios que comienza a las 12 de la noche? Eso es casi como ‘por favor, no nos vean’.

Ah, tal vez era eso. Ahora lo entiendo....

PD: Ya recordé lo que más me gustó y lo pueden ver aquí arribita: Luisana Lopilato. Ni me acuerdo qué fue lo que hizo en la premiación. Da lo mismo.

Saturday, October 20, 2007

Que Nadie los Detenga

Mientras aún se agolpan las lágrimas por que Arctic Monkeys están tan cerca y tan lejos (24 octubre, Luna Park, Buenos Aires), dos grandes noticias remecen la cartelera de conciertos, y hacen del fin de año algo mucho más sabroso. A saber:

THE RAPTURE, EN SU PUNTO: Los neoyorquinos supieron hacerse los locos cuando trataron de meterlos en el saco de los Strokes, Liars y Yeah Yeah Yeahs, se encerraron en su búnker y durante varios años trabajaron en el notable ‘Pieces of People We Love’.

Los vi un 31 de julio del 2004 en el Curiosa Festival en Randalls Island, NYC, y sigo pensando que estuvieron entre lo mejor, en una noche en que también vi a Interpol y The Cure. Su sarcasmo, desparpajo e insolente sentido del ritmo hizo de ese set una celebración irónica que disfruté con la cara de sorpresa que uno pone cuando no espera pasarlo tan bien en un carrete, y se queda hasta el final.

El 13 de noviembre en el Teatro Caupolicán nos veremos las caras de nuevo. Ojo que es una gran banda, pero ese lugar va a necesitar bastante ayuda para llenarse.

Una muestra de los Rapture, 'House of Jealous Lovers':




BECK, CUANDO MENOS LO ESPERÁBAMOS: Todos quedamos en shock cuando se filtró que el trovador funk será el acto de soporte de The Police el próximo 5 de diciembre en el Estadio Nacional. La comparación obvia fue con Franz Ferdinand y U2, y ya escuché a muchos snobs diciendo ‘iría por Beck pero no por Police’. Mmm.

Sin ir más lejos, ya hay una noble iniciativa de los fans para pedir un show en solitario del autor de 'Devil's Haircut'. El link, aquí.

Lo concreto es que Beck vuelve a Sudamérica tras esos inolvidables show del 2001, cuando el Festival Rock in Rio propició una masiva bajada de artistas de primera división (desde Foo Fighters a Britney Spears, desde Neil Young a REM), y algunos como el rubio ‘loser’ también pararon en Buenos Aires. Beck promovía el muy funky ‘Midnite Vultures’ y ese 17 de enero se mandó un show de la puta madre en el Campo de Polo de Baires. Acá están los testimonios de los diarios Clarin y Pagina 12.

Beck abrió con ‘Novocane’, y ‘The New Pollution’, y alimentó todo el tiempo su repertorio ganador con extraños movimientos pélvicos y hasta algunas referencias a James Brown. Inolvidable su balada ‘Debra’, la cual nunca supimos si era cantada con ese nivel de emoción en serio o en broma.

Beck Hansen no viene en su mejor momento. Sus dos últimos esfuerzos ‘Güero’ y ‘The Information’, no son relevantes y su último single de mayor repercusión fue la sentida ‘Everybody’s Got to Learn Sometime’ del soundtrack de ‘Eterno Resplandor de una Mente sin Recuerdos’. Ojalá alguien le explique que este es su primer desembarco en Chile y hay algunas deudas históricas. Necesitamos partir por los hits.

Aquí está Beck en lo de Letterman haciendo su single 'Nausea':

Friday, October 19, 2007

Trátame Suavemente

Volvieron.

Chicos, nos vemos el miércoles.

Setlist SODA STEREO, River, 19 de octubre

Juego de Seducción
Telekinesis
Imágenes Retro
Texturas
Hombre al Agua
En Camino
La Ciudad de la Furia
Fue
Picnic en el 4B
Zoom
Cuando Pase el Temblor
Corazón Delator
Signos
Sobredosis de TV
Persiana Americana
Danza Rota
En Remolinos
No Existes
Sueles Dejarme Solo
Primavera 0
En el Séptimo Día
Un Millón de Años Luz
De Música Ligera
Disco Eterno
Cae el Sol
Prófugos
Zona de Promesas
Nada Personal

Joey Bishop (1918-2007)

Sincronía: mi papá me trajo una revista MOJO de su viaje y aparecía un notable reportaje sobre las conexiones del Rat Pack con el clan Kennedy y cómo se las arreglaron para juntar en los mismos ‘negocios’ a la Mafia de Chicago con la Presidencia de EE.UU. Para ignorantes como yo, el relato es alucinante y dan ganas de querer saber más, más y más de una época que parece haber ocurrido hace mil años.

Además, es una historia que dejó víctimas; si no, pregúntenle a JFK o a una tal Marilyn.

Al buscar en Wikipedia más info sobre el Rat Pack, me encuentro con que no sólo eran Sammy Davis Jr, Frank Sinatra y Dean Martin. A este grupo de ‘amigotes’, bautizado por la legendaria Lauren Bacall, también se sumaban a veces Judy Garland y Kim Novak, pero en rigor, el trío era secundado siempre por Peter Lawford y Joey Bishop.

El jueves 18 de octubre ese quinteto oficialmente perdió a su ultimo miembro vivo: Joey Bishop murió a los 89 años por una falla múltiple en su hogar de Newport Beach. Los más legendarios de ese exclusivo club ya estaban hace rato jugando a la cartas y tomando martinis en el otro mundo.

Célebre por sus dotes de comediante, Bishop hizo evidente la faceta de stand up que tenía el show del Rat Pack, con esa mezcla única de música cool y chistes improvisados, talentos que conviven sólo en tipos muy despiertos como eran ellos.

Una vez que la sociedad con sus partners pasó a mejor vida, Bishop supo reinventarse en la TV, siendo cara habitual en espacios como el de Johnny Carson, donde sus remates de tallas y velocidad para el humor lo convirtieron en referencia importante de leyendas actuales como Conan O’Brien y David Letterman.

A Joey Bishop le tocó cerrar la puerta por fuera. Un brindis por el Rat Pack.

Full Temporada

Tantos shows, tanta pega, tantos trámites. Tan poco tiempo. Mes de conciertos, dicen. Comentemos algunos, entonces:

METHOD MAN

Fecha: Sábado 06 de Octubre
Lugar: Velódromo Estadio Nacional

Fallecido Ol’ Dirty Bastard, y encerrado en su laboratorio RZA, sólo nos queda el 'Hombre Método' en la primera línea de Wu-Tang Clan, la marca más rentable del hip hop de los últimos diez años. Por eso era un must verlo.

¿Temores? Muchos; los obvios: perder la billetera o la vida en manos de ese publico, y a nivel musical, caer en la típica modorra de los shows de hip hop antes de la mitad del set. Ni lo uno ni lo otro: tras una dupla de dignos teloneros (Cilvaringz y Salah Edin), Clifford Smith se para puntual y desde el primer segundo da clases de flow. Cada rima cae en el lugar preciso, y cuando no es igual que en el CD, la improvisación suena incluso mejor.

La compleja relación entre un público de habla hispana con un estilo cantado no sólo en inglés sino en jerga del brígido Staten Island podía complicar las cosas. Nada de eso: dio lo mismo. Method Man prioriza ritmo y beat por sobre todas las cosas, se esfuerza por hacer de un show plano en el papel una verdadera fiesta y lo consigue con creces.

Quizás sea uno de los mejores MC’s, pero también es un flaite que se hizo famoso siendo flaite, y por lo tanto, no va estar muy dispuesto a cambiar viejos hábitos. Method Man se encaramó a las estructuras del escenario, pidió que le arrojaran su querida ganja, y hasta caminó entre las manos del público perdiendo bandana y celular a causa de la proeza. El hombre es de verdad: se paseó entre los choros y salió parado. La sacó barata.

Mejor Momento: El cierre con ‘Triumph’, la declaración de principios de Wu-Tang Clan. No se podía terminar con otra.

Peor Momento: Caminar por Pedro de Valdivia, desde Grecia a Guillermo Mann. Ufff, ni en el Bronx se ve lo que yo vi.

DON OMAR

Fecha: Viernes 12 de Octubre
Lugar: Pista Atlética Estadio Nacional

Sin proponérmelo, es la tercera vez que veo a Don Omar este año, tras lo que fue Viña y el ‘Duelo de Maestros’. El miedo volvía a acechar por el tipo de público que se pudiera encontrar en un show con el más popular de los reggaetoneros (tranquilo, Daddy; no dije 'el mejor').

Esta vez la producción se preocupó al menos de poner a la prensa en un corralito donde no fueras una presa tan fácl del lumpen (OJO: tan). Así, vi la apertura del recital al lado de Luli, Pato Laguna, Adriana Barrientos, Janis Pope y Giovanni Ananías (sí, dije Giovanni Ananías). Si eso no es realismo mágico, no sé que es. Era como si LUN hubiera cobrado vida.

Pero bueno, a la música: la producción en escena del show es irreprochable. Un video sirvió de intro (flaaaite, pero sirvió para aleonar al público: Don Omar dice cosas como ‘ yo era tan pobre, tan pobre...' pero con abrigo de cuero a lo Matrix) y luego entra a escena una banda completísima y sin reparos, con coristas y bailarinas incluídas. Lo cual nos lleva a la siguiente conclusión: el único punto bajo de un concierto de Don Omar es Don Omar.

Claro, el hombre no hace más que ralentar su batería interminable de hits, a punta de discursos de cuarta, tratando de dar cátedra sobre relaciones entre los sexos, la hermandad latinoamericana o claro, Dios. ¿A quién mierda le puede interesar Dios cuando se está perreando, me pregunto yo?

Ni hablar de lo guataca y estático que está el boricua, o de esos lentos de kermesse que cantó. Lo que uno va a hacer a un show de reggaeton es a mover lo que tiene y eso Don Omar lo entrega sólo a cuenta gotas con una ecuación absurda: tema lento - tema rápido - tema lento - tema rápido, y así. Tal vez, soy yo el que no lo entiende, pero me sigue intrigando como una canción como ‘Angelito’ es un éxito.

Don Omar vende perreo pero también vende cebolla. A mí al menos, el paquete completo no me interesa.

Mejor Momento: La seguidilla imparable entre ‘Nadie como Tú’ ‘My Space’ y ‘Ayer la Vi’. Ese es el Don Omar que vinimos a ver.

Peor Momento: ¿Apenas 75 minutos de show? ¿Irse sin tocar ‘Calm my Nerves’, ‘Reggaeton Latino’, o ‘El Señor de la Noche'? ¡Devuelvan la plata!

VICENTICO

Fecha: Sábado 13 de Octubre
Lugar: Teatro Caupolicán

El hombre nos visita todos los años, a lo Johansen, así que hay muchos otros shows en la retina como para comparar. El trato estaba claro desde antes: la prioridad de Vicentico era mostrar ‘Los Pájaros’, su más reciente trabajo, y eso iba directamente en desmedro de escuchar el camión de clásicos Cadillacs que uno querrá escuchar hasta el fin de los días.

Difícl tarea entonces convencer a la gente de escuchar tanto tema nuevo, pensé. Sin embargo, los prejuicios se disipan rápido: el gordo lanza tres tracks recientes y la audiencia los recibe como cánticos de estadio. La banda de acompañamento es sólida y no hace más que sumar delicadeza y aguante a las cadencias del cantante.

Más cerca de Ruben Blades que de Joe Strummer, el ahora de Vicentico es masivo con ‘M’ mayúscula: la cumbia y todos sus derivados son la columna vertebral de su presentación, lo cual es recibido con saltos y bailoteos por el respetable.

¿Saludos a Cadillacs? Claro, obvio: entre otras, ‘Padre Nuestro’; una versión en voz bajita de ‘Mal Bicho’; ‘Siguiendo la Luna’, y el cierre inevitable con ‘Vasos Vacíos’ y ‘Demasiada Presión'. Son canciones demasiado cargadas de emociones. Y él lo sabe, y cuida esos temas y las riega todos los días.

Mejor Momento: ‘Desapariciones’, impresionante. Los Cadillacs me enseñaron a entender las cosas que pasaban en el Cono Sur y que nadie me quería contar. Imposible no conmoverse con la interpretación sentida del gordo.

Peor Momento: Más que por algo que pasó, fue por lo que no pasó. No hubo saludos a ‘Fabulosos Calavera’ o ‘La Marcha del Golazo Solitario’ (excepto la prescindible ‘Los Condenaditos’), los más notables trabajos Cadillacs. Plop.

Wednesday, October 10, 2007

Nice to Know You

La conexión emocional es directa, aunque su música no la necesita. Hace más de diez años, el programa de MTV, ‘Lado B’, me mostró un video llamado ‘Take me to your Leader’, con un flaco disfrazado con un taparrabos y un registro de voz igualito a Mike Patton. Lo encontré taquilla: yo tenía 18 años, una obsesión con la mixtura entre hip hop y rock, y muchas ganas de que ciertos grupos me acompañen por el resto de mi vida.

Al año siguiente, trabajé en un sitio web llamado Conexión Santiago, y ahí me tocó comentar muchos discos. Rodrigo Echave y Alvaro Riveros, de la vieja guardia de Sony Music, me pasaron algunos álbumes de los que denominaban ‘artistas en desarrollo’: ‘Miami’, de Babasónicos, ‘XTRMNTR’ de Primal Scream, y ‘Make Yourself’ de Incubus. De ahí para adelante, estaría más que atento a todo el material que emanara del quinteto de Calabasas, California.

Incluso, mi paso por radio Rock & Pop está diametralmente cruzado por la rotación insistente de los singles de ‘Morning View’ (‘Nice to Know You’ sonando a rabiar mientras las Torres Gemelas caían) y más tarde, cuando yo mismo ocupé el cargo de Echave y Riveros, me encargué de la difunsión de su placa más política: ‘A Crow Left of the Murder’.

Por eso, el desembarco de Incubus en Chile era una gran noticia.

Partimos con el pie derecho: el lunes entrevisté a Ben Kenney (bajo) y José Pasillas (batería). Hablamos de obviedades como la salud de Mike Einziger (guitarrista, su mano debió ser operada y ello forzó al aplazamiento de los shows, que estaban pactados para mayo), la respuesta del público a su más reciente esfuerzo, ‘Light Grenades’, y su visión de la administración de George W.

Pero también nos dimos tiempo con Ben para hablar de su pasado en el combo hip hop The Roots (a él le gusta más ‘Game Theory’; yo prefiero ‘Phrenology’), y ante la eventualidad extrema de optar entre ser los nuevos Chili Peppers (vigentes, pero carentes de rock) o los nuevos Faith No More (extintos, pero convertidos en leyenda), José optó por lo primero (‘Yo quiero envejecer haciendo esto’).

En medio de la conversa, Brandon Boyd pasó a nuestro lado en dirección desconocida y en breves segundos, su presencia vendió exactamente lo que le conocemos: actitud cool, desplante espiritual, una facha construída con tablas de surf, y el relajo de saberse un winner. California State of Mind.

Lunes 08, 20:57 horas. Doce mil personas repletan el Arena Santiago. Los cinco al escenario. Gritos sordos de las nenas ante la presencia de Boyd, y ‘Quicksand’ seguida de ‘A Kiss to Send us Off’, las dos primeras del ‘Light Grenades’. La voz no se escucha aún. Preocupación. ‘Wish you Were Here’ llega para emocionar y por fin la voz de Brandon suena fuerte y clara.

Sobre el escenario, el estilo jazzero del bajista y la deuda de José Pasillas con Stewart Copeland evidencia su condición de virtuosos al servicio de un sonido que requiere esa maestría sólo en contadas ocasiones. ‘Anna Molly’ recorre el costado más directo y rockero de la banda, pero es en ‘Pistola’ donde los músicos se dan su gustito: la jam es eterna y hasta se permiten hacer un par de solos. De pasada, Brandon también agarra instrumento y guitarrea con desorden cual Eddie Vedder en San Carlos de Apoquindo.

Mientras DJ Kilmore juega en plan autista alternando tornamesas con teclados, queda claro que el escenario tiene un jefe: Mike Einziger no cede espacio con sus 35. 628 efectos de guitarra, los que le permiten controlar el ambiente que proyecta Incubus. El hombre es el director de orquesta, lo sabe y lo hace notar. Un cabrón, digámoslo.

El mejor bloque de la noche llega de la mano de los hipnóticos lentos: la afrodisiaca ‘Are You In’ seduce de entrada, pero es en la despojada ‘Drive’ donde quedas completamente cautivado. Para rematar, ‘Megalomaniac’, les salió igualita que en el disco, y eso sí que es un halago. La muy extendida ‘Sick Sad Little World’ es otra instancia para que cada uno le saque punta a su instrumento, hasta que ‘Nice to Know You’, cierra la primera parte con el público ávido de más.

Para la vuelta, todos esperamos que llegue ‘Pardon Me’, pero en lugar de esa, homenajean a su primera época con la muy heavy ‘Favorite Things’, y Brandon Boyd provocando el delirio al despojarse de su polera. ‘Clean’ es el preludio para el cierre, y el final es notable: ‘Aqueous Transmision’, con esas cuerdas orientales que invitan al plácido sueño, como si los Incubus se encargaran ellos mismos de dejarte acurrucadito en tu cama.

Para el segundo día, algo que se veía venir y era bastante lógico: pese a que Alfredo Lewin anticipó lo contrario (palos de ciego), la banda modificó parte importante de su setlist, tanto con las canciones escogidas, como con el orden. Ejemplos de esa situación en Chile sobran: Chili Peppers ’99, Pearl Jam 2005, y hasta Coldplay hace unos cuantos meses, por nombrar algunos que hicieron doblete acá.

En la segunda pasada, abren con ‘Nice to Know You’ y siguen con ‘Wish You Were Here’. Algunos temen que los hits se agoten rápido, pero la banda arremete con ‘Circles’ y confirma que el set de hoy será mucho más equilibrado. ‘Anna Molly’ y ‘Pistola’ se mantienen, pero las sorpresas siguen: ‘Just a Phase’ y ‘The Warmth’ nos iluminan para recordar el periodo más inspirado del grupo.

Se nota que Brandon Boyd está más relajado que ayer. Le pide al público que no apriete a los de adelante, intenta hablar más en español y, promediando la mitad del show, se libera de su camiseta cumpliendo con la exigencia femenina. Como capa de superhéroe, se deja una bandera chilena.

Dig’ es su más reciente single. En vivo, crece sin límites y se transforma en un himno de esos que exigen encendedores y celulares prendidos a los gritos . Antes de salir del escenario, ‘Warning’ clausura el set en alto, con el saludo necesario a los viudos de ‘Morning View’.

Al regreso, no contábamos con la gloriosa ‘Stellar’, quizá el mejor momento de las dos jornadas. Delicada y detallista, pero también agresiva e intensa, la carta de presentación del ‘Make Yourself’ brilló por encima del resto del set. Para el final, el rock se tomó el Arena Santiago y los chicos repitieron ‘Favorite Things’ y ‘A Kiss to Send us Off’.

Dos días de show. Dos finales distintos. Calma y Furia. Cuerpo y Alma. Rock para Nenas. Pop para Machos. 24 mil personas reunidas en torno a un puñado de canciones. Incubus estuvo en Chile. Y yo estuve ahí para contarlo. Qué bueno es poder estar ahí.

Para los ñoños como uno, aquí están los setlist:

8 OCTUBRE
Quicksand / A Kiss To Send Us Off / Wish You Were Here / Anna Molly / Pistola / Vitamin / Blood On The Ground / Redefine (Acoustic ) / Are You In? / Drive / Megalomaniac / Sick Sad Little World / Oil And Water / Nice to Know You / Favorite Things / Clean / Aqueous Transmission

9 OCTUBRE
Nice to Know You / Wish You Were Here / Circles / Anna Molly / Pistola / Vitamin / Just a Phase / The Warmth / Drive / Megalomaniac / Sick Sad Little World / Under my Umbrella / Dig / Warning / Stellar / Favourite Things / A Kiss To Send us Off

Wednesday, October 03, 2007

Hail to the Thief

Si no lo sabes, la historia es la siguiente: Radiohead lanzará el 10 de octubre su séptimo disco, ‘In Rainbows’, a pesar de no tener sello discográfico. Pero eso no les importa nada: fiel a su cuestionamiento permanente de la industria musical, los seis de Oxford ofrecen el álbum sólo a través de su sitio oficial. ¿Cuánto vale? Lo que tú quieras. En serio. NO, en serio. Tú pones el precio.

Recapitulemos para que quede claro: más o menos, desde el ’99 en adelante, los sitios de intercambio de archivos (Napster, Audiogalaxy, iMesh, Soulseek, Emule, Bit Torrent y un eterno etcétera) permiten que tú no tengas que pagar para acceder a audios, videos e incluso textos. Te puedes saltar el intermediario, y NO pagar por acceder a lo que quieres consumir; sólo necesitas saber que existe, desearlo y buscarlo online.

Los sellos y las distribuidoras de cine y libros hablaron de delito, se escudaron en el conflicto valórico que implica y Metallica demandó a usuarios de dichos sitios. Pero no se puede tapar el sol con un dedo. Desde el minuto 1 en que esa opción fue posible, se hizo evidente que era un punto sin retorno. Tal vez la gente mayor de 40 años y con nulo vínculo con el PC seguirán comprando un formato físico, pero esa es una generación con fecha de vencimiento.

Salieron cuestionables informes que hablaron de un alza en las ventas globales de CD’s gracias a la ‘difusión’ que permitía el fácil acceso del MP3. Mentira: la industria disquera viene en picada y no sólo en mercados marginales como Sudamérica, sino en TODOS lados.

Los esclavizantes contratos que asocian a artistas y disqueras cada vez se hicieron menos necesarios para los artistas, a excepción de gente como U2 o Madonna que precisan distribución mundial. Para el resto, que venden menos o que funcionan sólo en mercados puntuales, el deal que les ofrecen los sellos ya no es negocio porque el público ahora consigue lo mismo gratis, por lo que sus ventas funaron. Ya no les sirve estar con los sellos, porque sólo ganan plata con los tours.

La parte fea es la puerta que se cierra para los artistas emergentes, que sí necesitan promoción para que la gente los conozca. Hoy en día, myspace y youtube parecen reemplazar con dignidad y efectividad a ese primer escalón. Si no, pregúntenle a Lily Allen y Arctic Monkeys.

Lo que nos trae de regreso a Radiohead, quienes en el fondo se hacen una pregunta esencial: ¿De quién es la música? ¿Cuánto se debe cobrar por la música? ¿Tengo que pagar por algo que puedo conseguir gratis?

Lo de regalar la música online no es nuevo: Manu Chao ofreció sin pago el primer single de su nueva placa, los ingleses de Ash anunciaron que en adelante sólo lanzarán sus sencillos por medio de su sitio y, a nivel local, los álbumes gratis de La Rue Morgue y Papanegro son sólo dos ejemplos al azar. Pero ninguna de esas bandas tiene el nivel, la trayectoria y la influencia de Radiohead.

Radiohead están en condiciones de golpear la mesa; ya lo habían hecho antes y lo de ahora es simplemente dejar la hipocresía de lado y asumir que todo el mundo se va a bajar el disco y no necesitan que un sello les chupe la sangre, ya que eso les va a reportar una ganancia irrelevante.

Por otro lado, el grupo dio una opción: quiénes no quieran bajarse el disco y deseen una copia física, pueden pre-ordenar su versión deluxe de ‘In Rainbows’, la cual vendrá en formato de CD doble (el CD 2 trae material exclusivo) más un vinilo, por un costo de 40 libras (80 lucas).

Yo todavía no tengo las cosas 100% claras; obviamente me bajo discos, pero además sigo comprando mucha música porque siguen habiendo artistas y álbumes de los cuales me interesa tener el objeto físico tanto como las canciones. Además, muchas veces bajo discos para cachar si vale la pena comprármelos. Eso sí, no les mentiré: por la pega me regalan muchos cd’s y eso hace que mi necesidad de comprar música sea inferior que quien no tenga esa chance. Por lo mismo, creo que mi opinión puede estar sesgada por ese hecho.

Radiohead le pusieron el cascabel al gato. Como dijo alguien por ahí, tal vez haya sido el primer grupo que lo hace pero sin ninguna duda no será el último.

Si la industria discográfica estaba agonizando, Thom Yorke y compañía le dieron el tiro de gracia.

Nunca pido comentarios, pero esta vez me interesa mucho que puedan dejar su opinión. En especial, si quieren plantear algún punto que no esté desarrollado acá. Espero su opinión!

Monday, October 01, 2007

Así se Acaba el Mundo

Asusta cuando aparece alguien que tiene las cosas demasiado claras. Y en especial, si las tiene claras siendo tan joven. A los 24 años, Richard Kelly escribió y dirigió Donnie Darko (2001), una película que a uno le provoca la atracción que genera estar al borde de un precipicio en un acantilado: morbo, miedo, desesperación, y depresión.

Hasta que simplemente te dejas llevar.

Donnie Darko se estrenó un martes pero no uno cualquiera, sino el martes 11 de septiembre de 2001. Hubo quiénes quisieron ver un símbolo incluso en eso. Lo concreto es que los gringos no estaban como para una película así de oscura y Donnie Darko salió de cartelera sin pena ni gloria. Para la posterior edición en DVD, Richard Kelly decidió lanzar su versión propia y le sumó 20 minutos y una re-compaginación de montaje y música en varias escenas. ¿El resultado? Uno de los DVD’s más vendidos en la historia de Amazon.

Aún siguen siendo múltiples las preguntas sobre esa inquietante fábula que incluye viajes en el tiempo, conejos parlantes, diálogos indescifrables y la mejor secuencia de la película, que usa música de Tears for Fears. El casting es perfecto: esta película inventó a Jake Gyllenhaal, su hermana Maggie se roba todas sus escenas, Jena Malone está adorable y sigo sin entender porqué no es más famosa, Patrick Swayze tiene una extraña resurrección y Drew Barrymore sostiene la estructura desde lejos.

Nadie pudo retratar de mejor forma el infierno que significa ser un adolescente.

Seis años después, Richard Kelly está de vuelta. Y para mantener la costumbre, el alumbramiento de su nuevo filme ha sido un desastre. El primer montaje de ‘Southland Tales’ se mostró el año pasado en el Festival de Cannes con horribles críticas, por lo que la salida de la película quedó pospuesta hasta nuevo aviso.

Un año después, el trailer de la edición definitiva ya está disponible y la fecha de estreno es impostergable: 09 de noviembre. Ahí será cuando los gringos vean primero este filme que compila los tres últimos episodios de un total de seis, que en el proyecto original venían en formato de novela gráfica.

De momento, hay varios sitios web extrañísimos que tratan de dar pistas sobre la historia (el oficial, el de Krysta Now, y hasta un myspace, entre otros) la que está protagonizada por una estrella de películas de acción (The Rock), dos policías que son gemelos idénticos (Sean William Scott, ‘Stiffler’ en ‘American Pie’) y una pornostar que trabaja en su propio reality show. El grueso del elenco está formado por actores del programa ‘Saturday Night Live’, más un bizarro cameo de Justin Timberlake, con número musical y todo. ¿Alguien dijo suicidio comercial?

Las opciones de Richard Kelly parecen seguir siendo extremas. Con ese argumento y esos actores, esta puede ser una nueva GRAN película de culto o el fiasco más grande del cine en mucho tiempo. Yo todavía creo que él va un paso por delante de nosotros. Espero que vuelva a demostrarlo.

A Richard Kelly no le gusta hacernos la vida fácil.

Aquí pueden revisar el trailer de 'Southland Tales':